Cantar a pleno pulmón. Pisar el césped con los pies descalzos. Comer nocilla con los dedos de las manos. Hacerte gritar. Los besos de esquimal. Y los de mariposa. Reir hasta que me duela la barriga. Bailar bajo la lluvía. Saltar más alto que nadie. Tirarme a la piscina con ropa. Hacerme pasar por guiri. Ser feliz. Poner la música alta hasta que se quejen los vecinos. Viajar. Quitarte la ropa. Leer la Sombra del Viento. Que me hagas cosquillas. Subir en montañas rusas. Perderme por el bosque. Desayunar donuts de chocolate. Escuchar los susurros del viento. Coleccionar secretos. Las tardes de invierno. Subir hasta el cielo. Comerte a besos. El sonido de la lluvia. Patinar sobre el hielo.

martes, 6 de septiembre de 2011

¿Sabes por qué me doy cuenta de que las cosas han cambiado?






Antes, cuando no te hablaba o te evitaba, removías cielo y tierra para saber de mí.
Ahora no haces nada.
Te quedas ahí, quieto. Mirando.
Pero no haces nada.

1 comentario:

Unknown dijo...

Pues sí,las cosas han cambiado un poco a mal.Habrá que hacer que cambie,no?