Cantar a pleno pulmón. Pisar el césped con los pies descalzos. Comer nocilla con los dedos de las manos. Hacerte gritar. Los besos de esquimal. Y los de mariposa. Reir hasta que me duela la barriga. Bailar bajo la lluvía. Saltar más alto que nadie. Tirarme a la piscina con ropa. Hacerme pasar por guiri. Ser feliz. Poner la música alta hasta que se quejen los vecinos. Viajar. Quitarte la ropa. Leer la Sombra del Viento. Que me hagas cosquillas. Subir en montañas rusas. Perderme por el bosque. Desayunar donuts de chocolate. Escuchar los susurros del viento. Coleccionar secretos. Las tardes de invierno. Subir hasta el cielo. Comerte a besos. El sonido de la lluvia. Patinar sobre el hielo.

martes, 26 de octubre de 2010

No estaban locos, estaban enamorados.



Robaron la noche, con luna y estrellas incluidas, y se la guardaron en el bolsillo que tenía cremallera, para que no se les escapara nunca, para no tener que dejar de soñar nunca.

1 comentario:

Mary dijo...

el amor es eso, un sueño que muchas veces se acaba ( o siempre, depende de como lo mires) me encanto!!